viernes, 17 de agosto de 2018

Hay que dejarlo ... es así



"Es que él es así..." Últimamente esta es una de las frases que más he oído. Con algún matiz que otro, con un cambio de género que dice que "ella" es así, pero al final, ¡es la mejor excusa del mundo!. Funciona en el entorno laboral y personal, en cualquier sitio y situación en la que nos encontremos.

¿Os habéis fijado que detrás de esta frase "es que él es así" se perdona todo, se permite todo, todo vale? Parece que "ser así" da carta blanca para comportarse como un auténtico energúmeno con cualquiera. Al final, los que quieren evitar los conflictos, o más bien no enfrentarse a ellos para resolverlos, utilizan esta mala excusa queriendo mostrar que con algunas personas "no se puede hacer nada".

Está claro que cada uno de nosotros somos como somos, tenemos nuestra propia esencia ... somos así... y con el paso del tiempo te vas dando cuenta que hay cosas de ti mismo que no van a cambiar, eso que es nuestro y solo nuestro. Se puede ocultar, disimular, pero la esencia de cada uno es lo que realmente somos, lo que nos hace libres y diferentes. Entender que cada persona tiene su esencia es lo que nos tiene que ayudar a no juzgar, porque a ninguno nos gusta ser juzgados, a no cuestionar sin conocer, a no sentenciar sin analizar y sin mirar con los ojos del otro.

Pero la esencia de las personas, el "ser así" no es una excusa para dar una mala contestación, tener un mal gesto, ser groseros, ser poco profesionales, cargar sobre la espalda de los demás nuestras frustraciones. Todos llevamos a nuestra espalda una mochila de experiencias que nos han llevado a ser quienes somos, a ser como somos, y por eso hay personas diferentes de otras. Hay personas que reparten tranquilidad y otras que generan malestar, unas que concilian y otras que agreden, unas que se conforman con ser así y otras que mejoran continuamente su esencia, unas que nunca dejan de crecer y que hacen crecer todo a su alrededor, otras que destruyen todo lo que encuentran en su camino.

A pesar de nuestra esencia, de esas cosas innatas que todos tenemos, hay una cosa que todos somos, por encima de todo, y es libres de elegir cómo es el entorno que queremos generar, libres de actuar según nuestro criterio. No vamos a cambiar a nadie, como tampoco nadie va a cambiarnos, al menos en lo fundamental, pero lo que sí podemos hacer es dejar de poner la excusa de que "él es así" y tomar las decisiones que nos lleven a resolver los conflictos.

Y ahora alguno pensará, como he pensado yo en alguna ocasión, que hay personas con las que estamos "obligados" a convivir, tanto en ámbitos personales como profesionales. Puede que sí, que tengamos que convivir con personas complejas, pero hay veces que esa "obligación" no es tan real y nos la auto imponemos por complacer a otros, y otras en las que nos resulta más "cómodo" dejar que sean así. Seamos honestos con nosotros mismos, seamos valientes. Si que "sea así" no nos vale, tomemos la decisión de qué hacer con ello.

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